Cómo hacer tu propia tintura e infusión de ginkgo para mejorar la memoria y la concentración
También sirve para tratar el asma, la tos o la claudicación intermitente.
El Ginkgo biloba es un árbol único, cuyos beneficios se conocen y aplican en China desde hace 4000 años. Se le conocen muchas indicaciones, por ejemplo, en casos de asma, tos y heridas, pero sus propiedades más probadas son las relacionadas con el aumento de la atención, la concentración y la memoria gracias a la mejora en el flujo de los vasos sanguíneos. También se utiliza para tratar la claudicación intermitente, el vértigo y los acúfenos. Una manera de aprovechar sus propiedades es mediante la tintura y las infusiones que se pueden preparar fácilmente en casa.
Tintura:
Para hacer la tintura se mezcla un litro de alcohol al 40-50% apto para la ingestión o aguardiente y 40 gramos de hojas secas, bien troceadas, de ginkgo. Se deja reposar entre cuatro y seis semanas, agitándolas ligeramente cada día. Transcurrido el tiempo, se filtran las hojas y se guarda la tintura en una botella oscura, en un lugar fresco y seco. Se emplea como preventivo tomado una cucharada al día.
Infusión:
Para hacerla se toman cinco partes de hojas de ginkgo secas y desmenuzadas y se mezclan con una parte de hinojo seco para mejorar su sabor. La mezcla se guarda en un tarro y se prepara usando una cucharadita por taza. Se cubre con agua hirviendo y se deja reposar 10 minutos. Se recomienda tomar de dos a tres tazas diarias.