Els Verds-Alternativa Verda lanza un llamamiento para que Cataluña sea declarada libre de la extracción de combustibles radioactivos

13.5.2013
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Una empresa minera ha solicitado a la Generalitat de Cataluña hacer prospecciones en el Anoia y Solsonès para buscar uranio.

Mientras la cuestionada técnica del fracking intenta abrirse a paso en España, otro alarmante peligro se cierne sobre el medio ambiente, en este caso, la extracción de uranio en Cataluña. La empresa Minera del Río Alagón S.L. ha solicitado a la Generalitat de Cataluña hacer prospecciones en el Anoia y Solsonès para buscar uranio, ha informado la Agencia EFE. La empresa, filial española de la multinacional Berkeley Resources Limited, está interesada en realizar prospecciones en nueve municipios.

Las localidades afectadas serían Castellfollit de Riubregós; Pujalt; Veciana; Sant Martí Segueioles; Els Prats de Rei; Calaf; Calonge de Segarra y Sant Pere de Sallavinera, todas en la comarca del Anoia, y en la Molsosa, en el Solsonès.

Ante esta noticia, la organización cívico-política ecologista Els Verds-Alternativa Verda, pionera de la ecología política en Cataluña, ha lanzado un llamamiento para que se reclame que el Gobierno de Cataluña y el Parlamento declaren el territorio catalán libre de la extracción de combustibles fósiles y radioactivos.

Según esta organización, Berkeley Resources y su filial española Minera del Río Alagón, ya fracasaron al intentar hacer prospecciones de uranio en Salamanca y Extremadura por la fuerta oposición de los ayuntamientos afectados y de los grupos antinucleares y ecologistas.

Treinta y seis años después, argumentan Els Verds-Alternativa Verda, se pretende repetir la agresión en Anoia. En 1977 la Junta de Energía Nuclear (JEN) solicitó una gran extensión de la comarca para la exploración y explotación de minerales radioactivos y se concedió en 1979 con un decreto que declaraba zonas de reserva provisional a favor del Estado para la investigación de minerales radioactivos en  Cataluña en una extensión total de 777.330 hectáreas.

En ese mismo año se creó la Coordinadora d'Ajuntaments per una Moratòria Nuclear (CAMON), que incluía todos los ayuntamientos afectados por los decretos y se organizaron manifestaciones antiuranio. Una comisión de científicos independientes asesoró a la CAMON y documentó los peligroso de la minas de uranio.

Desde entonces, el Estado español no ha retirado estas reservas ni tampoco el Parlamento catalán ha exigido que se deroguen, a pesar de los estudios que en su momento hizo la comisión científica de la CAMON y que demostraron los graves efectos que las prospecciones y las posibles explotaciones de uranio tendrían para el entorno y la salud de la población, especialmente por la contaminación radioactiva de las aiguas y de la atmósfera provocadas por el radón, el gas radioactivo, que se produce en la trituración de la pechblenda y la uranita, asociadas a materiales carboníferos, y la utilización de agents ácidos por la concentración del urani.
 
De momento el Departament de Territori i Sostenibilitat y la Direcció General de Qualitat Ambiental no se ha manifestado sobre la solicitud recibida. Els Verds-Alternativa Verda denuncian que este silencio alienta las intenciones del Estado y de la multinacional Berkeley Resources, vinculada al lobby nuclear internacional, de introducir la minería de urani en Cataluña y exigen que se declare el territorio catalán libre de la extracción de combustibles radioactivos y fósiles, en un comunicado suscrito por el Grup de Científics i Tècnics per un Futur No Nuclear, la sectorial 3E (Ecologia, Entorn i Energia) de la Assemblea Nacional Catalana, la Associació Una Sola Terra y la Associació Dia de la Terra.


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