Los probióticos alivian el estrés y la ansiedad
Comer yogur rico en probióticos dos veces al día puede aliviar la ansiedad y el estrés, pues reducen la actividad en el área emocional del cerebro, según un estudio reciente.
Comer yogur rico en probióticos dos veces al día puede aliviar la ansiedad y el estrés, pues reducen la actividad en el área emocional del cerebro, según un estudio reciente.
Los participantes del estudio que consumieron yogur con probióticos vivos dos veces al día durante un mes mostraron niveles más bajos de actividad en las áreas del cerebro asociadas con la emoción y el dolor, según investigadores de la School of Medicine de la University of California, Los Angeles (UCLA), al mismo tiempo que descubrieron que su consumo se asocia con una mayor actividad en las áreas asociadas a la toma de decisiones.
Los investigadores han sugerido que las bacterias que se encuentran en los intestinos envían señales al cerebro que pueden cambiar con el tiempo, dependiendo de la dieta de la persona.
Estudios anteriores habían demostrado que las bacterias intestinales beneficiosas afectaban al cerebro de ratas, pero ninguna investigación había confirmado hasta ahora el mismo efecto en el cerebro humano.
Los científicos ya habían encontrado que el cerebro envía señales al intestino, razón por la cual el estrés y otras emociones pueden contribuir a los síntomas gastrointestinales. El nuevo estudio, realizado en 36 personas, mostró que las señales también se desplazan en sentido contrario.
Los participantes se dividieron en tres grupos: uno comía un yogur con cultivos vivos de bacterias dos veces al día durante un mes, otro grupo tomó un producto lácteo sin bacterias vivas, mientras que el tercer grupo no recibió ningún producto lácteo en absoluto.
"Nuestros resultados indican que algunos de los contenidos de yogur pueden cambiar la forma en que nuestro cerebro responde al medio ambiente. Si tenemos en cuenta las implicaciones de este trabajo, el dicho 'Eres lo que comes' y 'tener sentimientos viscerales' toma un nuevo significado. Nuestro estudio muestra que la conexión intestino-cerebro es una calle de dos vías", dijo el Dr. Kirsten Tillisch, de la UCLA.
El Dr. Emeran Mayer, quien también trabajó en el estudio, dijo que lo que comemos altera la forma en que nuestras bacterias intestinales descompone los alimentos. Mientras que las dietas ricas en verduras y fibra promueven las bacterias intestinales saludables, la dieta occidental típica, llena de grasas, azúcares y carbohidratos, puede hacer lo contrario.
Las personas con trastornos digestivos relacionados con disbiosis intestinal (un desequilibrio en las bacterias del intestino), tales como el síndrome del intestino irritable, pueden mostrar estos cambios en la respuesta cerebral si son tratados con probióticos.
El Dr. Mayer también sugerió que las cepas probióticas específicas en el yogur podrían tener beneficios para la salud tales como el alivio de la ansiedad, el estrés y otros síntomas del estado de ánimo en el tiempo.
Es posible que el cambio de la composición de las bacterias intestinales pueda conducir a tratamientos para los trastornos de dolor crónico, dijo, así como síntomas de enfermedades cerebrales como el autismo, el Parkinson y la enfermedad de Alzheimer.
Fuente: UCLA