Las claves para tomar un desayuno sano de verdad
El despertador suena y comienza la división en la sociedad: una parte no puede pasar sin su primera comida del día, y la otra prefiere quedarse un rato más en la cama que levantarse a desayunar. ¿Quién tiene más razón, y cuál es el mejor desayuno?
¿El desayuno es la comida más importante del día?
Se ha repetido un millón de veces, pero muchos nutricionistas no creen actualmente que el desayuno sea la comida más importante del día. Tienden a creer que lo decisivo es que la ingesta total a lo largo del día sea correcta, sin que importe demasiado el número de ingestas o cuándo se realiza.
Pero lo que queda claro es que si se desayuna, se debe hacer bien, eligiendo alimentos saludables y descuidar el paladar.
Es importante la mezcla óptima de proteínas, hidratos de carbono, fibra y micronutrientes para que el cuerpo y la mente obtengan toda la energía y sustancias que necesitamo en un jornada.
• Los niños pequeños, los adolescentes, los empleados de oficinas y todas aquellas personas cuyos trabajos se desarrollan sentados necesitan un desayuno ligero en calorías pero abundante en nutrientes que favorecen la capacidad mental y que no acaben acumulándose en barriga y caderas.
• Las personas con profesiones o trabajos más físicos se benefician por lo contrario de un desayuno contundente que fortalezca la musculatura y aporte energía.
¿Cuáles son los ingredientes de un desayuno sano?
Las personas son únicas en su estructura corporal, sus demandas de nutrición y su movimiento. Sin embargo, hay consejos que resultan útiles para todos. Por esta razón la siguiente lista de alimentos es apropiada para todas las personas que no deban cuidarse de alergias o intolerancias:
• Ensalada fresca de frutas: se puede meter en ella lo que más guste: manzanas, plátanos, peras, bayas…Tiene la ventaja de que se puede ir variando con las frutas que van apareciendo en cada nueva estación.
• Pasas y otras frutas desecadas: es rica en nutrientes y corona a la perfección un sano muesli casero. Ayudan a combatir la ansiedad por consumir chocolate y chucherías y además activan las células grises.
• Yogur de soja: le da un toque especial a la ensalada de frutas y además aporta proteínas de calidad.
• Cuajada de soja: también aporta buenas proteínas, se puede cortar en rebanadas y servir en bocadillos integrales con hojas de aromáticas frescas.
• Copos de avena: un superalimento con razón, pues contiene proteínas, vitamina B, fósforo, hierro, zinc y magnesio. Además, gracias a su fibra, protegen y regeneran la flora intestinal.
• Nueces de Brasil, almendras, avellanas o piñones: son un gran alimento para el cerebro. Los frutos secos además aportan magnesio, ácido fólico y grasas sanas.
• Huevos: están llenos de energía, contienen vitamina D, K, B12 y biotina, además también son ricos en selenio, hierro y ácidos grasos insaturados.
Alimentos que no deben estar en un desayuno sano
Algunos alimentos no son apropiados para degustar de buena mañana. Tras levantarse, el metabolismo todavía no está en su máxima capacidad, de ahí que un desayuno demasiado copioso o contundente puede sobrecargarlo rápidamente y producir pesadez de estómago. De ahí que sea mejor evitar:
X - Cremas comerciales de chocolate: son muy sabrosas, pero contienen demasiados azúcares y grasas insanas.
X - Panecillos o pan blanco: para su fabricación se emplea sólo el almidón del cereal, de ahí que el pan blanco sea menos nutritivo y sacie por poco tiempo.
X - Embutidos grasos: como el salami, la mortadela o el chorizo. Son grasos y están llenos de aditivos perjudiciales. Recuerda que los elaborados a base de carne roja son cancerígenos según la OMS.
X - Quesos muy grasos como Camembert, Cheddar o Gorgonzola.
X - Bollería industrial: es rica en azúcares, grasas y aditivos.
Consejos para preparar un desayuno sano a los que les cueste ponerse en marcha
Muchas personas lamentan, cuando empiezan a oír los rugidos de su estómago, que no se hayan tomado un poco de tiempo para desayunar. Y al contrario de lo que muchos creen, un desayuno sano puede prepararse rápidamente.
1- Si no quieres prepararte un muesli casero, tómate una barrita comercial de muesli eco y de calidad, sin azúcares ni grasas añadidas.
2- Después de cenar prepara una sabrosa ensalada de frutas y métela en un frasco de cristal tapa de rosca para mantenerla por la noche en la nevera.
3- Prepárate un smoothie de frutas y verduras: es rápido y el cuerpo aprovecha muy bien los nutrientes que contiene.
4- Prepárate un bocadillo integral con tomate y huevo, por ejemplo, y llévatelo como tentempié cuando a media mañana te ataque el hambre.
Un desayuno sano es la entrada perfecta al día y forma parte de un un estilo de vida sano. Si a todo esto le añadimos caminar en lugar de tomar un medio de transporte y usar las escaleras en lugar del ascensor, disfrutaremos de un día ejemplar.