Reducen 10 veces la cantidad permitida de bisfenol A en los envases de plástico mientras se espera la prohibición definitiva
La sustancia es un disruptor endocrino que altera los sistemas reproductor, inmunitario y nervioso.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria ha decidido rebajar 10 veces la cantidad de bisfenol A (o BPA) permitida en los envases y recubrimientos alimentarios de plástico. La medida ha sido tomada a la luz de los estudios que demuestran los efectos de esta sustancia sobre los sistemas endocrino, reproductor, inmunitario y nervioso. Además abre un periodo de consultas antes de lanzar su dictamen final sobre este compuesto tóxico.
El bisfenol se emplea en la fabricación de numerosos objetos de plástico (policarbonato, un tipo de plástico rígido que se usa, por ejemplo, en las garrafas de agua) y revestimientos interiores (epoxifenílicos) de latas de conserva de aluminio. También es un componente de los papeles térmicos donde se imprimen los tickets de compra, los sellos dentales, fiambreras, papel higiénico reciclado, .
El problema es que esta sustancia es capaz de imitar la acción de las hormonas naturales en el organismo humano y se han relacionado con numerosos riesgos para la salud. La Unión Europea ha llevado a cabo una exhaustiva revisión de más de 450 estudios y ha concluido que la dosis diaria tolerable debe reducirse de los 0,05 miligramos al día por kilo de peso corporal a 0,005 mg hasta que se despejen "las incertidumbres en torno a los riesgos del bisfenol para la salud humana".
La decisión definitiva sobre el bisfenol se tomará previsiblemente a lo largo de 2014. Sería de esperar que se aplicara el principio de precaución y se prohibiera, evitando de esta manera que una sustancia con efectos perjudiciales contamine innecesariamente los alimentos. Esta es la posición de Francia, entre otros países. Mientras la prohibición no llega conviene evitar los envases de plástico en general.
Por otra parte, la idea de que los envases de plástico no son un problema si no se calientan no es del todo cierta. El calor aumenta la liberación de la sustancia al contenido, pero esta también ocurre a temperatura ambiente.
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