Las sabrosas y curativas capuchinas
Esta planta que muchos cultivan en su balcón o en sus jardines además de aportar belleza visual tiene efectos positivos sobre la salud y encima está muy rica.
Sus grandes flores brillan en tonos rojizos y anaranjados. Adornan balcones y jardines. Pero no hay demasiada gente que sepa que estas bellas flores (Tropaeolum majus) también son comestibles y no sólo las bellas flores sino también las hojas y además tienen virtudes medicinales.
El sabor de las hojas es ligeramente picante, parecido al de su hermano pequeño el berro hortelano o mastuerzo. Picado finamente enriquece las ensaladas y le da un toque muy interesante, al igual que a las salsas. Con una pequeña cantidad ya es suficiente para notar su intenso sabor. Ópticamente sus hojas desmenuzadas también enriquecen platos de pasta y pizzas.
Las flores tienen un sabor más suave, son ideales para decorar bufetes fríos y postres. Su nombre se lo debe al espolón posterior que tiene la flor que recuerda a las capuchas de las túnicas de los monjes.
Efectos sobre la salud
La patria de las capuchinas es Perú, Colombia y Bolivia. En estos países la planta también tiene una larga tradición de planta medicinal. La planta es especialmente rica en vitaminas, y minerales y un remedio empleado para limpiar la sangre, ya que apoya al cuerpo en su desintoxicación. También estimula el apetito y la digestión, favorece la circulación y aporta bienestar. A la planta se le atribuye una suave estimulación. Tiene glucosinolatos que adoptan un papel de protección. Están presentes en las células de la planta y no se liberan hasta que la planta es masticada o partida y entra en contacto con la enzima mirosinasa, entonces se convierten en el picante aceite de mostaza.
Los aceites de mostaza tienen un efecto de freno sobre las bacterias, los virus y los hongos así que se considera un antibiótico natural. Para su uso medicinal se emplean las partes aéreas de la planta así como sus semillas. Los importante es trabajar la planta fresca ya que al secarse pierde parte de sus propiedades. En sudamérica las hojas se utilizan desde hace mucho tiempo para tratar heridas infectadas. Nuevas investigaciones de la Universidad de Würzburg (Alemania) corroboran este efecto curativo.
Infusión, decocción y tintura
En caso de bronquitis, gripe, resfriados, cistitis e infecciones genitales se toman tres tazas de la infusión al día para hacerla: se cogen de una a dos cucharaditas de hojas recién desmenuzadas y se cubren con una taza de agua hirviendo. Se cuelan tras 15 minutos.
En caso de pérdida de cabello se hace una decocción a partes iguales de capuchinas, corteza de roble y ortigas y se masajes con el liquido regularmente el cuero cabelludo.
Para hacer una tintura se toma un frasco que se cierre con tapa a rosca y se llena con 100g de flores y hojas recién desmenuzadas y se cubre con alcohol al menos de 30%. A esto se le añaden 2cms de rábano rusticano y se deja reposar la mezcla dos semanas. Después se filtra y se mete en un frasco oscuro. Se tomaran tres veces al día 20 gotas en caso de resfriados, bronquitis y cistitis.
Ensalada de capuchinas
Además de en infusiones y tinturas, también se puede disfrutar de la capuchina en una ensalada.
Ingredientes para 4 personas:
• 1 puñado de flores enteras
• 1 puñado pétalos
• 1 puñado de hojas
• 2 cucharadas de rúcula desmenuzada
• 1 lechuga romana pequeña también desmenuzada
• 1 cucharada de vinagre de frambuesa
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• 1 diente de ajo picado muy fino
• un poco de mostaza de estragón
• sal y pimienta
Mezclar por un lado las hojas desmenuzadas y por el otro los ingredientes de la vinagreta. Se echa la vinagreta sobre la ensalada y se decora con las flores enteras.
Cultivo de capuchinas
Su cultivo es muy sencillo, crece y florece con profusión. Por desgracia también es una planta que muy a menudo es atacada por orugas y pulgones. En caso de pocos intrusos con un chorro de manguera se arregla el problema. En caso de un ataque masivo hay que tratar la planta con algún fitosanitario ecológico. Y respete el tiempo de espera para poder consumir la planta.