La III Jornada Ambiental organizada por la Universidad de Barcelona y Bodegas Torres reúne a más de 150 participantes preocupados por la calidad del agua

30.5.2014
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Expertos reclaman una actuación inmediata para hacer frente a la contaminación que afecta a la mitad de los pozos de Cataluña.

El 30% de estos acuíferos están afectados por nitratos.

La contaminación del agua del subsuelo en Cataluña es un problema grave que es necesario abordar y solucionar de manera inminente, implicando tanto a la administración como al sector privado. Así lo han manifestado los científicos y expertos que han participado esta semana en Barcelona en la III Jornada Ambiental organizada por la Universidad de Barcelona y Bodegas Torres, juntamente con el meteorólogo Tomàs Molina, para reflexionar sobre el estado de las aguas subterráneas, conocer las causas de la contaminación y buscar alternativas a la gestión actual.

Los datos presentados por el responsable de la Unidad de Caracterización y Control de las Aguas Subterráneas de la Agencia Catalana del Agua, Josep Fraile, han puesto de manifiesto la gravedad de la situación: “de las 53 masas de agua subterránea que tenemos en Catalunya, 29 están en mal estado según los parámetros que marca la directiva europea. Concretamente, el 30% de estos acuíferos están afectados por nitratos”. Según Fraile, “la contaminación de las masas de agua proviene principalmente de las explotaciones ganaderas, la agricultura intensiva y la actividad industrial y minera, superando los límites aceptables de cloruros, sulfatos y amonio, entre otros”.

Esta evidencia ha arrancado el compromiso por parte del secretario de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Enric LLebot, de adoptar una actitud proactiva para hacer frente a esta problemática. “Es necesario que la administración, no solo conozca sino que también actúe para gestionar correctamente y proteger los acuíferos, de la misma manera que fue necesario el reconocimiento del cambio climático por parte del gobierno de los Estados Unidos para que se decidiese actuar”, ha afirmado.

Con el título “¿Por qué no podemos beber agua de pozo en Cataluña?”, los más de 150 asistentes a la Jornada Ambiental han podido conocer de primera mano la realidad del estado de las aguas subterráneas, el problema del exceso de purines y modelos exitosos de gestión, gracias a las intervenciones de la quincena de expertos en la materia que han participado en el simposio.

Kevin Grauwels, consejero asesor de Flemish Land Agency, ha expuesto las políticas que se han desarrollado para gestionar el exceso de purines a Flandes, Bélgica, y las consecuencias que esto conlleva. Unas políticas sustentadas en una estrategia integral que determina desde la alimentación del ganado hasta el almacenamiento y el uso de purines como fertilizante. Además, a diferencia de lo que pasa en Catalunya, los ganaderos, que cuentan en todo momento con el asesoramiento y suporte de expertos, están obligados a gestionar ellos mismos los excedentes de purines.

La viabilidad de adoptar en Catalunya el modelo de Flandes ha estado uno de los temas debatidos en la mesa redonda, en la cual han participado Ricard Parés, director de la Asociació Catalana de Productors de Porcí, Xavier Flotats, catedrático de Ingeniería Ambiental de la UPC, y Jesús Soler, presidente del grupo de Defensa del Ter, que ha defendido que “la problemática de la contaminación se concentra con el modelo de explotación de las fábricas de producción porcina”. El exceso de purines en Cataluña y los costes para gestionarlos -que según el modelo flamenco pueden llegar a los 20€/m3- ha puesto de manifiesto la dificultad de lograr el equilibrio entre los intereses del sector porcino, que ve difícil asumir estos costes, y la salvaguarda de la calidad de las aguas y de los terrenos de cultivo. 

La necesidad de encontrar alternativas a la gestión de purines que se hace actualmente en el Estado español ha sido también acentuada por María Félix, de Iberia Renovables, que ha apuntado que la eliminación de las primas que cobraban las plantas de gestión centralizada de residuos las hace inviables económicamente: “La Reforma Eléctrica ha reducido un 40% las primas que cobraban las 29 plantas de gestión centralizada de residuos que había en España, lo que ha conllevado el cierre de algunas de ellas y, por lo tanto, graves repercusiones medioambientales ya que gestionaban más de 2,5 millones de toneladas anuales de residuos”.

También Jaume Boixadera, responsable del Servicio de Producción Agrícola de la Generalitat de Catalunya, ha atribuido al proceso conocido como ‘Haber–Bosch’ la contaminación de nitratos de las aguas de Cataluña y, en su ponencia, ha destacado la complejidad de determinar la cantidad de abonos y purines necesarios para una harmonía entre la productividad, la sostenibilidad y la calidad del suelo y del agua.

La gestión del agua y el mantenimiento de la calidad es un problema de alcance mundial. Carlos Garriga, project manager de la fundación We are water, ha puesto de manifiesto, con una serie de cifras impactantes, las consecuencias de la falta de acceso al agua potable, que provoca “1,6 millones de muertos al año, la mayoría de niños menores de 5 años, y es la fuente de enfermedades muy graves como el cólera, la salmonela, el hepatitis, la malaria o la malnutrición entre otros”.

La responsable de la campaña contra el cambio climático de Greenpeace, Aida Vila, ha reivindicado la necesidad de velar por la calidad de los recursos hídricos, haciendo un apunte a la peligrosidad de la técnica del fracking para el agua subterránea que el sector de los hidrocarburos está empezando a aplicar y que consiste en la inyección de grandes cantidades de agua y productos químicos en el subsuelo para extraer petróleo o gas.

También han participado en la Jornada Salvador Bueso, responsable del Departamento de Hidrogeología y Captaciones Subterráneas d’Aqualogy; Toni Mestres, presentador y divulgador de la ciencia en programas de televisión, que ha sido el moderador; Jordi Garcia, director de Alumni UB, y Miguel A. Torres, presidente de Bodegas Torres. Tomàs Molina ha sido el responsable clausurar la jornada y ha hecho un llamamiento para que jornadas como ésta vayan más allá del debate y la reflexión y se materialicen en actuaciones: “hace falta unir fuerzas para que la opinión de los expertos y la voz de los afectados sean escuchadas y tenidas en cuenta, para motivar la búsqueda de soluciones”.

Como novedad, la tercera edición de las Jornadas Ambientales, que organizan anualmente la Universitat de Barcelona y Bodegas Torres, ha contado con la entrega del I Premio Torres & Earth a la Innovación Medioambiental con el objetivo de dar a conocer y premiar los estudios, proyectos, experiencias e iniciativas de los estudiantes que velen por la preservación del medioambiente. Los proyectos, presentados en formato póster, han sido validados por el comité científico de la jornada, que también ha participado en la elección del mejor trabajo expuesto, conjuntamente con el público asistente. La persona ganadora ha sido Marta Rusiñol, del Laboratorio de Virus Contaminantes del Agua y Alimentos de la Universitat de Barcelona, con el proyecto ‘Trazar el Origen de la Contaminación del Agua de Pozo’.

 

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