El mapa español del cáncer: la contaminación, el tabaco y la dieta inapropiada aumentan la incidencia
Un estudio epidemiológico saca los colores al cáncer en España.
Las mayores incidencias aparecen relacionadas con la contaminación, el tabaco y la dieta inapropiada.
Gonzalo López Abente ha dirigido el equipo de investigadores del Centro Nacional de Epidemiología que ha creado el mayor atlas de la mortalidad por cáncer realizado hasta la fecha en España. Muestra numerosas manchas rojas, correspondientes con las zonas en las que los riesgos de morir por ciertos tumores doblan la media del país. Los datos gráficos sirven para deducir las causas para una mayor incidencia de la enfermedad. A menudo, las manchas rojas se corresponden con entornos industrializados. A continuación resumimos algunas de las relaciones halladas entre cáncer y causas ambientales:
• El consumo insuficiente de frutas y vegetales, y el exceso de productos cárnicos curados puede explicar la mayor incidencia de cáncer de estómago en áreas rurales de Castilla y León (como Burgos y Palencia).
• La contaminación puede asociarse a la concentración del cáncer de pulmón en ciudades y en zonas de Extremadura, Andalucía occidental, Asturias y Cantabria donde además la proporción de fumadores todavía es grande.
• El gas radón que es emitido por el granito y se acumula en las viviendas puede explicar la mayor incidencia de cáncer de pulmón entre mujeres en algunos pueblos de Pontevedra y Ourense. El Gobierno tiene paralizada una normativa para el control del radón.
• La minería del carbón a cielo abierto puede asociarse a un riesgo incrementado del 9,7% de sufrir cáncer de colon, y un 6,6% de padecer cáncer de pulmón. Minas de este tipo se encuentran en León, Palencia, Teruel, Ciudad Real y Córdoba.
• En el entorno de las cementeras aumenta la mortalidad por cáncer colorrectal o de estómago, según un estudio presentado por López Abente.
• La exposición a ciertas sustancias químicas industriales, como las aminas aromáticas, empleadas en la producción de colorantes, pinturas, tintes, gomas, cuero y aluminio, se relaciona con incrementos en el cáncer de vejiga, como se deduce de la mayor tasa de mortalidad en pueblos de Cádiz, Sevilla y Huelva, con su Polo Químico, y en la comarca catalana del Bages, otra zona con industrias textiles y químicas.