Receta original del muesli del doctor Bircher-Benner, una fuente de salud
En la clínica del doctor naturista suizo Bircher-Benner este plato era muy habitual, ya que es extraordinariamente completo e incluye fruta fresca.
Bircher-Benner (1867-1939) fue un famoso médico suizo naturista que hizo de la alimentación la principal medicina para sanar a sus pacientes. Descubrió que en la materia viva de los alimentos crudos inalterados había un gran poder curativo.
En 1897 inauguró la Clínica Bircher-Benner en Zúrich, por la que pasaron personajes de renombre como Nicolás II, Golda Meier o Thomas Mann. A este médico debemos el famoso muesli, aunque ese desayuno rico y saludable poco tiene que ver con los actuales mueslis de cereales azucarados y empaquetados.
En la clínica de Bircher-Benner este plato era muy habitual. Al principio se designó como "plato de fruta". En su casa, se le llamaba simplemente "el plato" y luego se transformó en "müesli".
Con su muesli, el doctor Bircher Benner no hizo más que poner en práctica una vieja costumbre, ya que en las regiones ricas en fruta se solía cenar antiguamente con frutas, cereales, leche y muchas veces nueces. Con este delicioso plato, consiguió que sus pacientes volvieran a comer fruta fresca y alimentos sencillos pero nutritivos. Tuvo tanto éxito que pronto se difundió por Suiza y otros países.
La clave del muesli de Bircher-Benner es que utilicen alimentos frescos y que se prepare en el momento de servir, no se puede preparar con anterioridad y conservarlo en la nevera. También es importante que las frutas sean las protagonistas, no los cereales. Es un excelente desayuno o un primer plato, pero desperdiciamos su potencial si lo comemos al final de una comida, como postre.
Muesli de manzanas
Ingredientes
• 8 gr de copos de avena (una cucharada rasa)
• 3 cucharadas de agua fría
• 1 cucharada de zumo de limón
• 1 cucharada de leche condensada si es necesario, que se puede sustituir por tres de yogur (pueden ser de soja).
• 200 gr de manzanas preferiblemente poco ácidas, jugosas y de pulpa blanca
• 1 cucharada de nueces, almendras o avellanas ralladas
Elaboración
Se maceran los copos de avena a remojo en agua fríadurante 12 horas (no deben cocerse).
Se mezcla todo y se hace un puré bien amalgamada.
Se lavan y se secan las manzanas y se rallan. Se mezclan de inmediato con el puré antes de que oscurezcan.
Por último, se esparcen encima los frutos secos rallados. Si no se usa leche condensada, puede añadirse una cucharadita de miel para endulzar. Queda exquisito.