La granada tiene un poderoso efecto antienvejecimiento
Los científicos han descubierto que una molécula de las granadas, transformada por los microorganismos del intestino, permite a las células protegerse de una de las principales causas de ese proceso.
Las granadas tienen el "asombroso efecto" de revertir el proceso de envejecimiento ayudando a las células a renovarse, dicen los investigadores de la Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne, en Suiza.
Esta fruta carnosa de color rojo contiene el precursor de una molécula que permite a las células renovarse y evita el deterioro muscular y enfermedades asociadas con el envejecimiento, como el Parkinson.
A medida que envejecemos, nuestras células se esfuerzan más para renovar sus centros de energía, que son las mitocondrias. Estos compartimentos internos, cuando ya no son capaces de llevar a cabo su función vital, se van acumulando en la célula. Su degradación afecta a la salud de muchos tejidos, incluyendo los músculos, que se debilitan gradualmente a lo largo de los años. Una acumulación de mitocondrias disfuncionales también parece jugar un papel en otras enfermedades del envejecimiento (Parkinson).
Los resultados de esta investigación realizada con animales de laboratorio ha sido "poco menos que increíble", dicen los científicos suizos. En algunos ensayos la esperanza de vida aumentó en un 45 por ciento.
La molécula mágica se llama urolitina A, que logra restablecer la capacidad de la célula para reciclar los componentes de la mitocondria defectuosa. "La urolitina A es la única molécula conocida que puede relanzar el proceso de limpieza mitocondrial", explica Patrick Aebischer, uno de los investigadores. "Es una sustancia completamente natural y su efecto es potente y medible".
Según han explicado estos científicos, en realidad la granada no contiene dicha molécula sino un precursor de esta. Sin embargo, las bacterias de la flora intestinal se encargan de transformar el precursor en urolitina A, siempre y cuando la cantidad de bacterias intestinales sea la adecuada.
Sin embargo, una pequeña minoría de gente no dispone de una flora intestinal correcta y por ello no obtendrían ningún beneficio de consumir granadas o zumo de granada, por lo que los investigadores están desarrollando un producto llamado Amazentis que ayudaría cuando la flora es insuficiente o inadecuada.