Un protector de salud que seguro que tienes en casa
Un producto humilde, barato, que todos tenemos en casa y que es un gran protector de la salud. Se trata del bicarbonato de sodio.
Un producto humilde, barato, que todos tenemos en casa y que es un gran protector de la salud. Se trata del bicarbonato de sodio.
Los médicos lo recomiendan a los pacientes con enfermedad renal, pero un nuevo estudio ha descubierto que una dosis diaria de bicarbonato de sodio puede ayudar a reducir la inflamación destructiva de enfermedades autoinmunes (donde el cuerpo se ataca a sí mismo).
Este antiácido económico, que se vende sin receta, parece ser que estimula al bazo a promover un ambiente antiinflamatorio que podría ser terapéutico frente a enfermedades inflamatorias, informan científicos del Medical College of Georgia de la Universidad de Augusta.
Paul O'Connor, director del del estudio, dio bicarbonato de sodio a personas sanas y también a ratones de laboratorio. Después de dos semanas, los científicos descubrieron que las células inmunes (macrófagos) parecían cambiar de misión: los macrófagos comenzaron a enfocarse en reducir la inflamación en lugar de promoverla.
Básicamente, el bicarbonato de sodio actúa sobre el bazo, que estimula o "activa" de forma natural la respuesta antiinflamatoria de los macrófagos. Enfermedades como la artritis reumatoide podrían beneficiarse de estas propiedades antiinflamatorias.
Cuál es la dosis adecuada
Sin embargo, con el bicarbonato nunca hay que pasarse. La dosis recomendada es de media cucharadita en un vaso de agua una vez al día. Cuando se haya disuelto por completo en el agua, se bebe lentamente. Nunca hay que consumir más de una cucharada y media al día, y los mayores de 60 años, máximo esa cucharadita por día recomendada. Dosis más altas son innecesarias si solo se desea mantener una buena salud.
Otros usos
Una dosis similar también se puede usar para limpiar la cara, pero con mucho cuidado y nunca cerca de los ojos y la boca. En altas dosis se usa para desatascar tuberías y para limpiar el horno o el WC, así que hay que utilizarlo con gran respeto.
Hay que consultar con el médico en caso de enfermedad o si se va a tomar de forma continuada.