El seminario “Ecohéroes, el otro mundo posible” intenta dar respuesta a la falta de acción ante el cambio climático
Joaquín Araújo inauguró el primer seminario Ecohéroes, el otro mundo posible, en el que un entusiasta grupo de educadores, periodistas, emprendedores y activistas alertaron sin tapujos de la mala salud de nuestro planeta: “¿Estamos aún a tiempo de hacer algo?”
En lo que coinciden todos los expertos que han participado en este primer Seminario Ecohéroes es en la urgente necesidad de cambiar profundamente nuestra relación con la naturaleza, de repensar y darle la vuelta a todo como a un calcetín. Cambiar lo que se está viendo que no funciona: el problema de la movilidad en las ciudades, la producción industrial de alimentos, el uso irracional de las fuentes de energía, los malos hábitos de consumo o la escasa educación medioambiental. Temas que se han abordado en este primer seminario, que ha nacido con vocación de continuidad (promovido por el Centro Asociado de la UNED “Andrés de Vandelvira” de la provincia de Jaén y por la Fundación Huerta de san Antonio de Úbeda).
El naturalista y escritor Joaquín Araújo abrió inauguró el encuentro en el que han participado la pedagoga Heike Freire, el ecodiseñador promotor de la cocina solar Manuel Vilchez, el ingeniero industrial y primer director de la Agencia Europea de Medio Ambiente Domingo Jiménez Beltrán, el periodista Carlos Fresneda y el educador ambiental Antero J. Cañada. Conferencias, talleres y encuentros que han tomado como punto de partida un enfoque novedoso: tenemos que olvidarnos de salvar al planeta, él sabe cuidarse solo. Lo que debería preocuparnos es el futuro que le espera al ser humano. Porque, aunque tenemos capacidad para vislumbrar lo que se avecina, no somos capaces de reaccionar hasta que no le vemos las orejas al lobo.
La conferencia inaugural de Joaquín Araújo, bajo el título De árboles y bosques, la ética del paisaje, nos animó a convertirnos en «emboscados», como él a hecho, plantando un árbol por cada uno de los días vividos. Y aún más, sintiendo al bosque como el origen, «somos una criatura del bosque», defiende Araújo. Las arboledas son sabiduría, dan vida, saben gestionarse y acogen de forma incondicional. En el bosque está la respuesta a nuestras preguntas sobre cómo proceder, cómo actuar ante los dilemas del presente. Pero lo hemos negado y lo hemos masacrado.
«Es estúpido que esta civilización se empeñe en expulsar lo que nos permite estar vivos, es la suprema torpeza», asegura Araújo, actual presidente del Proyecto Gran Simio en España. Es escalofriante pensar que, tan solo en un siglo, se ha perdido un tercio de los bosques y que cada día mueren, como mínimo, 20 millones de árboles en el planeta.
Heike Freire, filósofa, psicóloga y pedagoga, expuso en su taller Educar en verde lo beneficioso que es mantener el contacto con la naturaleza en el proceso de formación de un ser humano, porque esto favorece el lenguaje, su capacidad de empatía, la gestión de las emociones y la capacidad de resiliencia. Una vez más, la necesidad de educar, de inculcar el conocimiento de las cosas. Tema sobre el que incidió también el taller La historia de un brick de zumo, impartido por el licenciado en geología y Educación Ambiental Antero Cañada, que advirtió del inmenso poder que tenemos como consumidores para cambiar unos hábitos que producen ingentes cantidades de basura, abusando de recursos tan preciosos como el agua o la energía.
En este sentido, tuvo lugar el taller Energía verde y renovable, que demuestra que "es posible" una forma distinta, sostenible, de producir y consumir. Y que sabemos cómo hacerlo, lo malo es que hay que querer y necesitamos organizarnos. “¿Qué nos lo impide?", se pregunta Domingo Jiménez Beltrán, asesor en la actualidad del Obsevatorio de Sostenibilidad en España. A esta cuestión responde de forma abrumadora el libro Ecohéroes, del periodista Carlos Fresneda, con 100 inspiradoras y emocionantes entrevistas, realizadas a personas pioneras en la defensa del medioambiente. En su taller El nuevo periodismo ambiental, Carlos abogó por dar un giro positivo a la narrativa sobre estas cuestiones, poniendo el acento sobre las iniciativas personales y colectivas ante la crisis climática.
"Los pequeños gestos son importantes", y como ejemplo de uno de ellos, el taller Cocinando al sol. Una muestra de cómo cocinar y procesar alimentos con cocinas y hornos con la sola energía del sol. Un invento que Manuel Vílchez presenta como una de las "armas de construcción masiva" para luchar a favor de un mundo más habitable. La “oda al fotón” de Manuel Vílchez sirvió de preámbulo a la puesta en común de los protagonistas de estas jornadas en el imponente escenario de la iglesia de San Lorenzo en Úbeda, que acogía al mismo tiempo la exposición Ve hacia la luz, una inmersión en el hiperrealismo mágico de Santiago Ydáñez.