Cómo ahorrar en calefacción con paneles reflectantes
Con este sistema se puede ahorrar hasta un 30% de energía en la calefacción.
Explicamos también cómo hacer un reflectante casero.
Con la factura de la luz por las nubes, todos vamos buscando formas de ahorro energético... por el planeta y por nuestro bolsillo. Hay una fórmula sencilla para ahorrar en calefacción, que es uno de los mayores gastos energéticos en invierno.
Se trata de colocar paneles reflectantes de calor detrás de los radiadores. Son unas planchas de metal y con forma dentada, lo que aumenta la convección y permite distribuir mejor el calor por toda la estancia. Evita que se pierda calor por la pared donde se sitúa el radiador y encima de este.
Además, el aire caliente gira en la habitación y se coloca en un punto más bajo del techo, lo que ayuda a reducir el tiempo en calentar el lugar y elimina los puntos fríos.
Con este sencillo sistema, se reduce la frecuencia de encendido de la caldera, se ahorra energía y dinero. Según los fabricantes de estos productos, se consigue ahorrar entre el 20 y 30% en los costes de calefacción instalando este sistema.
Una alternativa casera, menos efectiva y eficiente, pero fácil de hacer, es colocar paneles de cartón grueso, de madera fina o incluso de corcho de embalaje, forrados de papel de aluminio. Si se forra solo una cara, esta debe ser la que se enfoque hacia la parte posterior del radiador.
Con ello conseguimos frenar el escape de calor por la pared donde se sitúa el radiador y que se refleje nuevamente hacia el aparato. Sencillo y práctico... mientras pedimos que se realice una auditoría que explique a los ciudadanos por qué la electricidad en España es una de las más caras de Europa.
Infografía: EcoDuvi