Lo dice un estudio científico: el carril bici hace que el tráfico sea más seguro para todas las personas

Un estudio sobre los patrones de tráfico denso en una ciudad de la costa este de los Estados Unidos muestra que los conductores tenían más probabilidades de reducir la velocidad cuando se acercaban a un carril para bicicletas a lo largo de la carretera. Este comportamiento reduce el riesgo de accidentes. Después de crear el carril bici, las muertes de peatones relacionadas con accidentes automovilísticos se redujo un 17%.

Según los autores, el carril bici tiene un efecto pacificados que aumenta la seguridad vial y reduce el riesgo de accidentes automovilísticos. El estudio brinda más evidencia de que los carriles para bicicletas salvan vidas de ciclistas, peatones y conductores, según la autora principal, Hannah Younes, investigadora asociada postdoctoral en el Centro de Transporte Alan M. Voorhees de Rutgers.

En las avenidas Cookman y Asbury en Nueva Jersey, la carretera de dos carriles es una ruta común hacia las populares playas del océano Atlántico de la ciudad. En uno de los cruces, los conductores raramente se detenían al girar para dejar pasar a los peatones, lo que provocaba accidentes. Los investigadores observaron los efectos en el tráfico después de crear un carril bici improvisado con conos. Un algoritmo de inteligencia artificial analizó la velocidad y la trayectoria de más de 9.000 coches antes y después de la creación del carril bici, y concluyó que, en el caso de los coches que giraban peligrosamente, la velocidad máxima se redujo un 28% y la media un 21%. El resto de coches redujo su velocidad un 8%. 

El estudio ha ofrecido un dato interesante sobre la señalización: los conos llaman más la atención de los conductores que las líneas pintadas, que reducen la velocidad solo entre un 11 y un 15 por ciento en los conductores que realizan maniobras más peligrosas. Los conos no solo son más visibles sino que crean un paso más estrecho que requiere más atención por parte de los conductores.