Limpiadores multiusos caseros
Son preferibles las opciones simples y con ingredientes no petrolíferos.
Los limpiadores multiusos prometen llevar la limpieza a cualquier superficie que se puede limpiar en húmedo. Y en general los resultados son buenos desde el punto de vista de la apariencia. Además son una alternativa fácil ante la oferta excesiva de productos que abarrota las estanterías de los supermercados y droguerías: limpiadores de cristales, de baños, extra fuertes, abrasivos, antibacterianos… La verdad es que la variedad, más que una ventaja, es un riesgo por la cantidad de compuestos contaminantes que vierten en los desagües.
El continuo lanzamiento de productos al mercado sólo obedece a una pura estrategia de mercadotecnia. En relidad, las fórmulas son prácticamente idénticas. Uno de los ingredientes más repetidos es el aroma artificial de cítricos, porque los estudios muestran que los consumidores los asocian instintivamente con la limpieza. No se necesita tanto detergente, cada uno con su envase contaminante de plástico y su lista de ingredientes sofisticados, para mantener la casa limpia.
Las personas que se simplifican más la vida optan por un cubo de agua y un único producto, como la pastilla de jabón tipo “piedra blanca”. Este producto está compuesto por arcilla blanca micronizada, copos de jabón, grasas vegetales, sodio y aceite de limón. Es biodegradable, pero hay opiniones contradictorias entre los usuarios sobre su eficacia en todo tipo de superficies. En buena parte, como con cualquier otro producto, en los resultados también intervienen la fuerza y la técnica de quien realiza la limpieza.
La potencia de una fórmula depende esencialmente de los ingredientes tensioactivos, que actualmente deben ser biogradables por ley. Los compuestos más problemáticos son los perfumes, que pueden alterar el sistema hormonal, así como los conservantes sintéticos, como el methylchloroisothiazolin, que desencadena alergias e irritaciones. Algunos, como los derivados del formaldehído, están bajo sospecha de producir cáncer.
Para reducir los riesgos para la salud y el entorno se recomienda elegir el producto con la lista de ingredientes más corta y utilizar dosis menores a las recomendadas por el fabricante. Hay que tender al cuanto menos, mejor, lo que además es bueno para el bolsillo. Otros consejos son preferir siempre las presentaciones líquidas que se diluyen en agua y protegerse las manos con guantes.
Limpiador improvisado
Un multiusos natural y de aroma agradable para todo tipo de superficies –acero inoxidable, encimeras, maderas, plásticos, cerámicas…– se elabora con una mezca de 600 ml de vinagre blanco, 300 ml de agua y 30 gotas de aceite esencial de eucalipto. Puede guardarse en un frasco pulverizador y se aplica sobre la superficie o utilizándolo para humedecer un paño.
También se puede recurrir a un detergente específico que nos guste y utilizarlo como un multiusos. Los lavavajillas, por ejemplo, contienen una proporción alta de tensioactivos y puede utilizarse en todas las superficies de la cocina y el baño diluyéndolo en abundante agua.
Los productos con algún aval ecológico son preferibles. Los que muestran “la flor” ecológica europea están sometidos a normas más estrictas. Por otra parte, las marcas ecológicas tradicionales, como Almacabio, Ecover, Eco Lino, Ulrich o Urtekram fabrican los detergentes menos lesivos para el entorno gracias al uso de ingredientes de origen vegetal en lugar de derivados del petróleo.
Verdades y mentiras en la etiqueta
La ley obliga a que los fabricantes ofrezcan la lista completa de ingredientes en la etiqueta del producto o bien a través de una web, pero aún no es posible encontrar fácilmente la composición exacta. Siempre serán preferibles los productos que ofrecen la información y entre estos, los que contienen menos ingredientes y más reconocibles.
No hay que hacer mucho caso de los términos publicitarios que aparecen en las etiquetas, como “natural”, “biodegradable”, los nombres de plantas o las referencias a supuestos laboratorios de control. No hay ninguna ley que limite su uso.
Conviene adquirir detergentes que se vendan a granel para reducir el impacto ambiental asociado al envase. Es una posibildad cada vez más extendida en tiendas eco.