Las botellas de agua están llenas de partículas de plástico (y pueden favorecer problemas de salud graves)

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Un estudio de la Universidad Estatal de Nueva York descubre que consumimos las micropartículas de plástico que están presentes en las aguas embotelladas de todo el mundo. 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado que revisará los riesgos potenciales que conlleva la presencia de micropartículas de plástico en el agua después de que un estudio haya revelado su presencia en el 93% de las muestras tomadas entre las principales marcas de agua embotellada. Estudios previos habían encontrado estas micropartículas en la sal de mesa, el agua del grifo y en alimentos como el marisco y el pescado.

El estudio, realizado en la Universidad Estatal de Nueva York en Freedonia a instancias del consorcio de comunicación Orb Media, analizó 259 botellas de 11 marcas diferentes, procedentes de 19 ubicaciones en 9 países (Estados Unidos, China, Brasil, India, Indonesia, México, Líbano, Kenia y Tailandia).

Las marcas analizadas fueron: Aqua (Danone), Aquafina (PepsiCo), Bisleri (Bisleri International), Dasani (Coca-Cola), Epura (PepsiCo), Evian (Danone), Gerolsteiner (Gerolsteiner Brunnen), Minalba (Grupo Edson Queiroz), Nestlé Pure Life (Nestlé), San Pellegrino (Nestlé) y Wahaha (Hangzhou Wahaha Group).

 

 

Nestlé bate el record de partículas, con 10.000 por litro de agua

Los investigadores descubrieron que estas botellas contenían una media 325 partículas de plástico por cada litro de agua. Estas partículas, normalmente invisibles, aparecieron al teñir el agua de color rojo, exponerla a luz azul y observarla a través de cristales anaranjados. En el vídeo superior se pueden observar con claridad. Una de las muestras, de la marca Nestlé Pure Life, mostró una concentración de 10.000 partículas de plástico por litro de agua. De las 259 botellas analizadas, solo 17 (el 3%) estaban libres de plásticos.

Las partículas son de diferentes tipos de plástico: polipropileno, nailon y plástico PET. Estas partículas pueden proceder del propio envase, de las tapas de las botellas o de la atmósfera, pues se encuentran flotando en el aire, después de desprenderse de, por ejemplo, la ropa de los empleados que trabajan en las plantas embotelladoras.

Las reacciones no se han hecho esperar. Un portavoz de la Organización Mundial de la Salud declaró al diario británico The Guardian que se "establecerá una agenda de investigación para realizar una evaluación exhaustiva del riesgo".

Cáncer, infertilidad y autismo

Los efectos de las partículas sobre la salud son muy poco conocidos. Los estudios indican que pueden facilitar la entrada en el cuerpo de sustancias contaminantes que se encuentran en el medio ambiente. Pueden fijarse en las paredes intestinales o traspasarlas y llegar hasta el sistemas linfático e incluso incrustarse en órganos como riñones e hígados.

Algunas investigaciones, citadas por la directora del estudio, la profesora de química Sherri Mason, relacionan estos agentes contaminantes con el cáncer, el bajo recuento de espermatozoides, los problemas de fertilidad e incluso el autismo.

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