La homeopatía se basa en el principio de curación por lo similar, expuesto teóricamente por el médico alemán Samuel Hahnemann a finales del siglo XVIII. En otras palabras: una sustancia que causa ciertos síntomas en una persona sana, puede curar esos mismos síntomas en alguien que está enfermo. Por ejemplo, el remedio Allium cepa, derivado de la cebolla (cuyo contacto causa lagrimeo y picor de ojos), se prescribe para pacientes con alergia al polen, especialmente si la nariz y los ojos están afectados. El tratamiento estimula el organismo para que ponga en marcha sus propios procesos de autocuración. Los homeópatas consideran la relación de los síntomas con el tipo de constitución del paciente y las circunstancias en que aparecen (estado de ánimo, el comportamiento, reacciones a los cambios atmosféricos y a la comida...). Como consecuencia de este atento examen individual, dos pacientes con un diagnóstico convencional idéntico pueden recibir medicinas homeopáticas muy diferentes.

Los preparados homeopáticos son diluciones de sustancias procedentes de plantas y minerales, más raramente de productos animales. Lo peculiar de estos medicamentos es que se encuentran tan diluidos que no se puede detectar ni una molécula del principio activo. Esto plantea un enigma sobre su modo de actuación, sin embargo existen estudios que demuestran su efecto real incluso sobre animales y plantas, lo cual excluye cualquier efecto debido a la sugestión. Una posible explicación es que durante el proceso de dilución el agua adquiere una “memoria” de la sustancia soluble original.


Indicaciones principales

• Tiene fama de ser muy eficaz en problemas recurrentes o crónicos, como alergia, eccema, artritis reumatoide, fatiga, asma, migraña, dismenorrea, síndrome del colon irritable, infecciones recurrentes de las vías respiratorias o urinarias y alteraciones del estado de ánimo (estrés y ansiedad).
• Las embarazadas y los niños son mucho más tratados por homeópatas que por cualquier otro tipo de naturópatas, en parte poque las medicinas carecen de efectos secundarios.
• La homeopatía tiene un enorme éxito en veterinaria y es utilizada asiduamente en las granjas ecológicas.

LO ÚLTIMO

• Una revisión de 100 estudios científicos sobre homeopatía, publicada por la revista médica Lancet, concluyó que el efecto homeopático es real con un 95 por ciento de confianza. Los autores explicaron: "los resultados no son compatibles con la hipótesis de que la acción clínica de la homeopatía es completamente debida al efecto placebo”.