LA OPCIÓN HOMEOPÁTICA

Miguel Luqui recomienda reforzar el equilibrio general y afrontar el reto de procrear con placer

La capacidad fértil de una persona depende de una serie de equilibrios: entre los sistemas fisiológicos, entre cuerpo y mente, entre la persona y el entorno... Para favorecer estos equilibrios la homeopatía propone un tratamiento individualizado que apoye la tendencia del organismo hacia la salud y lo hace mediante remedios que carecen de efectos tóxicos.

Miguel Luqui, médico homeópata con más de 25 años de experiencia, afirma que "la infertilidad es un problema cada vez más frecuente y no es raro que se plantee como motivo de consulta principal o secundario". Los problemas hormonales ováricos y tiroideos en la mujer, y en el hombre, el estrés, los hábitos alimenticios y de vida poco saludables, a parte de problemas estructurales o infecciones locales son las causas más frecuentes de infertilidad, según su experiencia. Pero el tratamiento homeopático difiere del convencional: "La homeopatía que yo practico trata de entender el problema local, sea el que sea, como un significante dentro de la totalidad psicobiológica de la persona. El objetivo es mejorar el equilibrio general, lo que favorece la funcionalidad de cada órgano". Para ello prescribe el remedio homeopático que se corresponde con las características constitucionales del paciente.

Luqui recomienda a todas las personas que deseen potenciar su fertilidad que "cambien de hábitos en beneficio de una vida más saludable y que reivindiquen el gozo y el placer de generar una nueva vida". Para ello "hay que elegir bien el momento, disfrutarlo y no interferir con la mente". "La vida siempre es un milagro", concluye.

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