Un delfín se acerca a un grupo de submarinistas para que le liberen de un anzuelo
Vídeo completo del salvamento.
Ocurrió cerca de Kona, en la Isla Grande de Hawái.
Leyendas de todo el planeta relatan cómo los delfines son capaces de ayudar a los seres humanos, pero lo que no se había visto era que un delfín se acercara a un grupo de buzos para que lo salvaran a él. Ha ocurrido en Hawái y ha sido filmado en primer plano en una secuencia que dura 8 minutos.
Los delfines son animales de gran inteligencia, pero se diferencian de los humanos en que carecen de una mano con un pulgar oponible al resto de los dedos, detalle que determina el modo de vida de las personas. Pero un delfín nariz de botella ha sabido buscar en el fondo del mar un ser con mano que pudiera liberarle de un anzuelo clavado en su costado, así como de un hilo que se había enredado en su boca y una de sus aletas pectorales, dificultándole los movimientos.
Los submarinistas que estaban observando y filmando unas rayas en el fondo marino, de noche, cerca de Kona, en la Isla Grande de Hawái, vieron como el cetáceo se les acercaba y nadada a su alrededor. Uno de los buzos, Keller Laros, sospechó que algo no iba bien y le hizo señas al delfín para que se acercara más a él. El animal lo hizo inmediatamente y mostró que estaba atrapado por el hilo. Laros comenzó a desenredarlo mientras el delfín se dejó hacer. Cuando se libró del hilo, se fue a la superficie a respirar y volvió para que le quitara el anzuelo. Luego se marchó como había venido.
Laros, instructor e investigador, afirma que el comportamiento del delfín, que implica capacidad para prever, demuestra su nivel de inteligencia. "Es una emoción enorme que sea posible ayudar a un animal que claramente comprende qué está pasando", ha dicho. "Hizo el esfuerzo de establecer una relación con nosotros [un grupo de seres humanos con bombonas de oxígeno, focos y cámaras, una escena que no es frecuente encontrarse en el mar] porque tenía un problema", añadió.
El salvamento, que tuvo lugar el pasado 11 de enero, fue filmado por la cámara Martina Wing, para quien la experiencia resultó "alucinante". La música que acompaña las imágenes es obra de su cuñado Hans Hug y se titula "Blue in Dark".
De alguna manera Laros ha salvado mínimamente el honor de nuestra especie, pues los delfines tendrían una vida tranquila y feliz si no fuera por las trampas que les tienden los seres humanos. Cada año mueren 10.000 delfines atrapados en las artes de pesca en aguas europeas.