Las bebidas energéticas pueden provocar ataques cardiacos

1 comentarios

Las bebidas energéticas pueden ocasionar problemas cardiacos graves e incluso paradas cardiacas, lo que supone un problema para aquellas personas que no saben que tienen un trastorno llamado síndrome Long QT.

Investigadores de la Universidad de Sidney y el Instituto Centenario de Australia han descubierto que el consumo de bebidas energéticas puede desenmascarar determinados trastornos cardiacos de origen genético como el síndrome QT largo, una anomalía en el sistema de conducción del corazón.

Este síndrome afecta apenas a una de cada 2.000 personas y suele provocar latidos cardiacos rápidos e irregulares que pueden dar lugar a la muerte súbita. Y un consumo de las bebidas energéticas puede ser suficiente para causar pequeñas arritmias que pueden poner en riesgo la vida de estos afectados.

Los autores muestran su preocupación por el auge de bebidas tipo 'Red Bull' o 'Monster', consumidas por millones de personas y cuyos efectos hemodinámicos en adultos jóvenes sanos ya había sido evaluado en estudios previos, observando un aumento de la presión arterial, pero sin cambios en la frecuencia cardiaca. Sin embargo, éste es el primer estudio diseñado específicamente para probar los efectos que estas bebidas energéticas pueden ocasionar en personas con las mutaciones genéticas involucradas en esta patología rara.

"El potencial riesgo cardiovascular de las bebidas energéticas continúa siendo un importante problema de salud pública", ha explicado el investigador principal, Christopher Semsarian. Su trabajo fue diseñado para evaluar las respuestas cardiovasculares agudas al consumo de bebidas energéticas en pacientes con síndrome QT largo congénito y descubrir si los efectos cardiovasculares identificados se correlacionan con cambios en los niveles sanguíneos de algunos compuestos de estas bebidas, como la cafeína o la taurina.

Para ello, reclutaron a 24 pacientes de entre 16 y 50 años, de los que más de la mitad presentaban síntomas y estaban en tratamiento con betabloqueantes. La mayoría se habían sometidos a pruebas genéticas y 13 de ellos tenían una mutación documentada como patógena o probablemente patogénica.

Dos latas bastan para tener problemas

Los participantes fueron asignados a consumir bebidas energéticas o a formar parte de un grupo control que no podía beberlas. La dieta energética eran dos latas de 'Red Bull' sin azúcar, que sumaban 160 miligramos de cafeína y 2.000 de taurina en medio litro.

Las bebidas del grupo control no incluían ninguno de estos compuestos. Los resultados del estudio muestran que tres pacientes (12,5%) presentaron una prolongación QT peligrosa tras el consumo de bebidas energéticas y dos de los tres presentaron aumentos bruscos de la presión arterial.

Estos pacientes tenían antecedentes familiares de muerte súbita, y dos de ellos habían experimentado previamente síntomas graves e incluso tenían implantado un desfibrilador cardioversor."Hay algunos pacientes que pueden tener un riesgo muy alto; pedimos precaución a la hora de consumir estas bebidas", comenta Semsarian.

Archivado en: